CDMX. A menos de dos semanas de que tomen posesión los nueve ministros electos mediante voto popular, la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, se despidió de la actual integración de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) con nuevas críticas a su funcionamiento.
Durante su conferencia matutina, la mandataria afirmó que la actual conformación del Poder Judicial representa “el fin de una era” caracterizada, según sus palabras, por prácticas de nepotismo y amiguismo en el interior de las instituciones judiciales.
“El fin de una era en el Poder Judicial, de nepotismo, claro que hay sus excepciones, siempre, pero es el fin de una era, de un Poder Judicial que servía a unos cuantos y que durante este periodo lo que demostró es que se producía a partir de amiguismos, nepotismos, supuestamente era a través de una carrera judicial, pero si más de la mitad eran amigos, hermanos, primos, pues evidentemente no funcionaba esa carrera y ahora pues inicia una nueva era a partir del 1 de septiembre y va a ser mejor, de eso no tenemos la menor duda”, declaró.
Las palabras de Sheinbaum se producen a días del relevo en la SCJN, que por primera vez en su historia será integrada por ministros electos a través del sufragio ciudadano, en un proceso derivado de la reforma judicial aprobada a inicios de 2025. El próximo 1 de septiembre se concretará el relevo mediante tres ceremonias institucionales.
De acuerdo con Hugo Aguilar, quien asumirá la presidencia del Alto Tribunal, la primera ceremonia incluirá la entrega simbólica del bastón de mando por parte de representantes de comunidades indígenas. Posteriormente, se llevará a cabo el acto oficial de toma de protesta ante el Congreso de la Unión.
La tercera ceremonia será el inicio formal de las sesiones del nuevo pleno de la SCJN. Al evento fueron convocados los titulares de los poderes Legislativo, Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado, y Sergio Gutiérrez Luna, presidente de la Cámara de Diputados. Ambos confirmaron su participación.
La presidenta Sheinbaum también fue invitada a la ceremonia de inicio de sesiones del nuevo pleno judicial, y su asistencia fue confirmada por la oficina de la Presidencia. La presencia de los tres Poderes en la primera sesión oficial de la renovada Corte marca un punto de partida en la aplicación de la reforma judicial, cuya implementación ha sido una de las prioridades del gobierno federal.
Los nuevos ministros fueron electos el pasado mes de junio en un proceso de votación que incluyó campañas, debates televisivos y ejercicios de deliberación pública. De los nueve nuevos integrantes, seis son mujeres y tres hombres. Su periodo comenzará con la promesa de renovar la legitimidad del Poder Judicial y enfrentar cuestionamientos previos relacionados con falta de independencia, vínculos políticos y privilegios estructurales.
En su mensaje, Sheinbaum insistió en que la entrada de los nuevos ministros permitirá corregir las deficiencias acumuladas en el sistema judicial. “Ahora pues inicia una nueva era a partir del 1 de septiembre”, reiteró. Las declaraciones fueron interpretadas como una despedida crítica hacia el actual pleno de la Corte, al que reiteradamente se le ha señalado desde el Poder Ejecutivo de haber actuado en función de intereses particulares.
Durante su sexenio, el presidente saliente Andrés Manuel López Obrador también sostuvo una relación tensa con el Poder Judicial, particularmente con la Suprema Corte, a la que acusó en varias ocasiones de frenar reformas estructurales impulsadas por su administración. La reforma judicial impulsada en 2025 por Sheinbaum fue aprobada con mayoría calificada en ambas cámaras y validada por al menos 17 congresos estatales.
La transición prevista para el 1 de septiembre incluirá además la entrada en funciones de los nuevos magistrados de los tribunales de apelación, el inicio de los nuevos órganos de control judicial y la implementación de un nuevo sistema de evaluación de desempeño para jueces y magistrados, todo ello bajo el argumento de combatir el nepotismo y la corrupción. El futuro del Poder Judicial en México, bajo una configuración que por primera vez responde al voto directo de los ciudadanos, se pone en marcha con una fuerte carga simbólica y política. Las primeras decisiones y resoluciones de la nueva Suprema Corte serán observadas como señales del rumbo que tomará la justicia en el país durante los próximos años.
Con información de Más Información.