Lázaro Cárdenas no veía lo fuerte, sino lo tupido

Lázaro Cárdenas Batel, jefe de la Oficina de la Presidencia, no veía lo fuerte sino lo tupido en el mensaje político (no podía ser de otro tipo) que dio la gobernadora Maru Campos Galván durante la audiencia pública para la reforma electoral quien hizo referencia en al menos once veces, sobre la importancia de escuchar a las entidades.

Primero ablandó el terreno: reconoció la justicia social y la inclusión del padre del funcionario cuatroteísta.

Luego vino la insistencia de escuchar las voces de las entidades, todo textual: en Chihuahua se libraron las primeras luchas por la transparencia electoral; refrendamos esa vocación federalista…la voz de Chihuahua debe ser escuchada; consenso desde las entidades federativas, por mencionar.

El tono subió de color cuando dijo: Porque la mayoría de los avances en el largo proceso de democratización del país han nacido de la periferia hacia el centro y de abajo hacia arriba. Nunca han surgido como imposición de arriba hacia abajo o desde el centro autoritario.

E hizo un nuevo embate: este proceso de reforma electoral federal debe escuchar a las entidades, a sus instituciones electorales y a su ciudadanía,

Citar más frases, sería dar vueltas, pero sin duda, la cara del funcionario federal denotaba a lo que la autodenominada Adelita se refería, pues las audiencias podrán tener de todo, menos escucha del Gobierno Federal y la 4T que quieren blindarse desde todos los espacios para 2027, 2030 y lo que venga, si acaso hay elecciones por simuladas que sean.

Hay que decirlo: bien por Maru, pero a ver si no repercute en su relación con la federación, como ya hemos visto señales vengativas.