Y ahora, ¿de qué vivirá Carlos Borruel?
El exalcalde, exdiputado, excandidato y expanista Carlos Borruel Baquera, deberá estar pensando en una nueva forma de llenar sus bolsillos porque el recurso otorgado por una jueza federal a la empresa Uber, le pegará directamente a su peculio.
Es que este personaje –y sí, salió del ámbito periodístico para convertirse en político, no es para sentirse orgulloso- es el dueño de las concesiones de taxis que dan servicio en el Aeropuerto internacional de Chihuahua “Gral. Roberto Fierro”, nada baratos, por cierto.
Aunque el exedil –pensando que aún es el último refresco (para no decir marcas) del desierto del PAN- se resiste a ofrecer tarifas bajas en los servicios de sus unidades o dejar que las plataformas ingresen a la terminal aérea para una mayor competencia del mercado y más opciones para los usuarios.
No dudemos que estemos viéndolo reactivarse en la política, pues los modestos carritos propiedad de su hijo, no se pagan solos ¿O sí?

 
						
