CDMX. A dos meses de iniciar su mandato, la presidenta Claudia Sheinbaum ha encabezado 44 conferencias matutinas, conocidas como “la mañanera del pueblo”. Aunque su formato presenta cambios significativos en comparación con las conferencias del expresidente Andrés Manuel López Obrador, el uso de datos engañosos o falsos por parte del gobierno persiste como un común denominador.
Las modificaciones incluyen la eliminación de la polémica sección “Quién es Quién en las Mentiras”, reemplazada por “El Detector de Mentiras”, un espacio menos confrontativo que presenta cápsulas semanales sin comentarios directos de la presidenta. Además, se han incorporado nuevas secciones como “Vida saludable”, “Humanismo mexicano”, “Mujeres en la historia” y “Suave patria”, con un enfoque en la promoción cultural y la igualdad de género.
La duración de las conferencias también se ha reducido significativamente. Mientras que López Obrador llegó a extenderse hasta tres horas y media, Sheinbaum ha limitado sus exposiciones a un máximo de dos horas, con respuestas más breves y menos adjetivadas. Sin embargo, la verificación de 16 declaraciones realizadas en las mañaneras por El Sabueso de Animal Político revela que funcionarios y la misma presidenta han difundido información falsa o inexacta sobre temas como seguridad, migración, presupuesto y justicia.
Entre los ejemplos más recientes se encuentra una declaración de Sheinbaum sobre la seguridad en Sinaloa, donde afirmó que prácticamente no había homicidios antes de la captura de Ismael ‘El Mayo’ Zambada. Los datos oficiales contradicen esta afirmación, ya que Sinaloa registró un incremento en homicidios durante los gobiernos de Morena, pasando de 499 en 2022 a 566 en 2023, según cifras de la Fiscalía estatal.
Otro caso relevante es la afirmación de que la prisión preventiva oficiosa no encarcela a personas sin pruebas. En realidad, esta medida se aplica con base en indicios, sin necesidad de pruebas concluyentes, lo que ha llevado a controversias sobre su constitucionalidad.
Respecto a migración, Sheinbaum y sus colaboradores atribuyeron la disminución del flujo migratorio a Estados Unidos a la “estrategia humanitaria” del gobierno mexicano, omitiendo mencionar el incremento de detenciones récord de migrantes y la implementación de medidas restrictivas por parte de Estados Unidos para evitar solicitudes de asilo.
Además, se ha detectado información engañosa sobre el presupuesto para la salud. A pesar de que Sheinbaum aseguró que no habría recortes, el proyecto de presupuesto 2025 contempla reducciones en áreas clave como hospitales, institutos y la Secretaría de Salud.
A diferencia de López Obrador, quien frecuentemente confrontaba a la prensa con descalificaciones como “chayoteros” o “prensa fifí”, Sheinbaum ha evitado un discurso abiertamente agresivo hacia los medios. No obstante, desestimó recientemente un reportaje de The New York Times sobre el reclutamiento de estudiantes para la fabricación de fentanilo, comparándolo con la serie de ficción ‘Breaking Bad’.
Aunque las conferencias han incorporado dinámicas como la prioridad a mujeres periodistas y la limitación de preguntas a cinco minutos por participante, algunos asistentes han señalado la presencia de youtubers y creadores de contenido pro-Morena, quienes han sido cuestionados por difundir desinformación política a favor del gobierno.
En términos de audiencia, las mañaneras de Sheinbaum tienen menos visualizaciones en YouTube que las de López Obrador. En sus primeros dos meses, alcanzaron un promedio de 455 mil visualizaciones, frente a las 522 mil que registró su antecesor en el mismo periodo. Sin embargo, la presidenta ha destacado en redes como TikTok, donde acumula seis millones de seguidores, casi el doble que López Obrador. Su video más visto, sobre las becas Rita Cetina, suma 51 millones de vistas, superando los 32.2 millones del video más popular de su predecesor.
En Instagram, Sheinbaum alcanza 1.5 millones de seguidores frente a los 1.6 millones de López Obrador, mientras que en Meta la diferencia es mayor: 3.3 millones de seguidores contra los 10 millones del expresidente.
La académica Ivonne Acuña, de la Universidad Iberoamericana, señala que las mañaneras de Sheinbaum son más estructuradas y menos incendiarias que las de López Obrador, con un énfasis en datos y contexto. Sin embargo, la persistencia de información falsa y manipulaciones estadísticas indica que este espacio sigue siendo utilizado como una herramienta para moldear narrativas y agendas políticas.
“Es un cambio de estilo, pero el fondo se mantiene. Las mañaneras siguen siendo un espacio para desinformar, aunque con menos confrontación directa”, concluye Acuña.
Con información de Más Información.