Cada semana, pequeños comerciantes que operan tiendas en las comunidades de México son obligados a pagar 500 pesos a delincuentes a cambio de poder seguir trabajando. Esta situación pone en riesgo la normalización de estas prácticas, alertó Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), según reportó Forbes México.


En el marco de la inauguración de la Expo Trastienda en la Ciudad de México, Rivera destacó que la extorsión a los tenderos es un delito en crecimiento. “Llegan y les dicen a los comerciantes que saben a qué hora llegan, a qué hora se van, a qué hora se van sus hijos a la escuela. Y les ofrecen ‘seguridad’. Entonces, los comerciantes empiezan a pagar porque tienen que proteger a su familia”, explicó Rivera, describiendo el modus operandi de los extorsionadores.


El líder de los comerciantes enfatizó que esta situación es como el moho, algo que está afectando al tejido social y que no debe permitirse que se normalice. “Estamos en ese punto, eso es lo más grave, que la sociedad mexicana empiece a aceptar que tengas que pagar por trabajar”, señaló.


Ante las presiones, algunos comerciantes han optado por moverse para tratar de desmarcarse de los delincuentes. “Hemos visto movilidad. Algunos comerciantes rentan los lugares en donde están establecidos, entonces se van y rentan en otro lugar”, añadió Rivera.


Rivera también mencionó que la ANPEC ha hecho constantes llamados a las autoridades para terminar con la extorsión y esperan obtener ayuda de Claudia Sheinbaum. “Ella está por entrar en funciones, y esa coyuntura puede ser favorable”, expuso.


Finalmente, el presidente de la ANPEC subrayó que la extorsión no solo afecta a los tenderos, sino a diversos giros económicos, insistiendo en que esta situación debe frenarse, ya que no ocurre en ninguna economía moderna.

Con información de Forbes México