CDMX. El arqueólogo Fernando Cortés de Brasdefer enfrenta un proceso administrativo por sus denuncias contra el Tren Maya, impulsado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y la Secretaría de la Función Pública.
Investigador y miembro del Consejo de Arqueología del INAH, Cortés ha sido crítico de la destrucción de vestigios arqueológicos debido a las obras del proyecto ferroviario, lo cual lo llevó a ser citado a una comparecencia el próximo 5 de noviembre en las oficinas del Órgano Interno de Control en la Ciudad de México.
El proceso inició formalmente en mayo y junio de 2023, cuando el INAH levantó actas administrativas en su contra. En su citatorio, el órgano de control específico de la Secretaría de la Función Pública acusa al arqueólogo de recorrer sin autorización tramos del Tren Maya, divulgar documentos oficiales y poner en riesgo la vida del personal del INAH en la región.
Cortés de Brasdefer sostiene que la principal causa de la investigación en su contra radica en su postura crítica hacia el Proyecto de Salvamento del Tren Maya, expresada a través de entrevistas y declaraciones públicas en las que denuncia lo que considera saqueo y destrucción del patrimonio público.
Señala además que el Consejo de Arqueología desaprueba su postura, lo que quedó reflejado en el comunicado No. 706 emitido el 17 de agosto de 2023. En este documento, el Consejo acusó a Cortés de realizar declaraciones desafortunadas e imprecisas que desinforman al público y desacreditan la labor de sus colegas en el proyecto.
A raíz de una carta difundida por Cortés en redes sociales y compartida por terceras personas, el Consejo de Arqueología declaró que el arqueólogo ha incurrido en una actitud de desacreditación hacia el INAH y sus colaboradores desde hace años. Según el pronunciamiento, Cortés ha recibido advertencias por divulgar información sobre proyectos arqueológicos sin autorización, lo cual entorpece la labor arqueológica y pone en riesgo datos de terceros involucrados. Además, el INAH subraya que Cortés no ha reportado anomalías formales sobre el Tren Maya a las autoridades del Consejo ni al Órgano Interno de Control.
El arqueólogo, que posee 45 años de experiencia y cuenta con un doctorado Honoris Causa, denuncia que el proceso en su contra es un ataque a su libertad de expresión y lo trata como si fuera un terrorista. También afirmó que algunos miembros del INAH, incluyendo al director del Centro INAH Quintana Roo, Margarito Molina, y el arqueólogo Moisés Valadez, lo han acosado públicamente en redes sociales.
Cortés asistirá a la comparecencia acompañado por el sindicato y miembros de la comunidad académica, reiterando su disposición a enfrentar las acusaciones: “Si la autoridad tiene las pruebas de lo que me acusa, que las presente. El comunicado del Consejo de Arqueología sigue en la página del INAH para destruir mi reputación; creo que llegó el momento de demostrar quién miente, Diego Prieto (director del INAH) o los trabajadores del INAH”, concluyó el arqueólogo.
Con información de Más Información.